domingo, 14 de noviembre de 2010

Un estilo elegante con esencia de los 80

27 OCTUBRE. SALA PENELOPE (MADRID)
Hurts_Pop electrónico ochentero y estética neorromántica
El concierto de Hurts era un "must".  Ese tipo de eventos a los que hay que ir sí o sí. Los que estuvieron sabrán de lo que hablo. Los que no (¿arrepentidos?), también. No había excusas para perderse la actuación de la que es la banda revelación del pop británico de este año. Simplemente, había que estar allí.
Theo Hutchcraft (voz) y Adam Anderson (teclado) presentaban su trabajo 'Happiness' por segunda vez en Madrid (ya hace unos meses ofrecieron un showcase). Con la sala Penélope a tope empezaba un directocon una puesta en escena impecable: un piano, rosas blancas y músicos de acompañamiento (incluido el tipo de los coros, solemne e inmóvil durante todo el concierto).Tanto Theo como Adam saben mantener las formas en el escenario y cuidar esa imagen solemne que se han creado. Gestos comedidos, ligeros balanceos a modo de baile y algún que otro comentario entre canción y canción... pero sin perder en ningún momento la seriedad y sobriedad que les caracteriza. El único momento de desmelene (y ni eso,por culpa de la gomina) llegaría con Evelyn cuando Adam se levanta del piano y agarra la guitarra.
El concierto tiene un comienzo intenso con Unspoken, Silver lining y Wonderful life. Los temas del disco, muy bien distribuidos, se van presentando poco a poco. La gente está entregada, se nota que hay ganas de ver a la banda en directo (y después del retraso de más de una hora sobre la prevista, más todavía). Los temas van cayendo hasta llegar al momento de Devotion y Confide in me (esta vez sin Kylie Minogue, que le venía mal pasarse por Madrid). Después es el turno de Stay, Illuminated y la bailable Better than love, que  pone el punto y final a un concierto rotundo. No hay bises. Hurts se marchan el escenario con la misma elegancia con la que llegaron.
Un primer trabajo con 11 temas sin desperdicio (todos tienen un "algo"), una cuidada imagen (su look está más que estudiado, aunque abusen de la gomina), colaboraciones con Kylie Minogue, y una muy buena crítica de sus directos hacen preveer que lo que a día de hoy es un grupo de "minorías" se puede convertir en algo muy grande.
El único 'pero' sería para la sala. Demasiado pequeña para un concierto tan grande... De todas formas, no me veo al dúo en el Palacio de los Deportes (por ejemplo) y no porque no sean capaces de llenarlo (cosa que no dudo conseguirían, visto lo visto) sino porque su música y todo el misterio que les rodea exige un ambiente mucho más intimista.
En definitiva, un directo rotundo que te deja con ganas de saber cómo será su próximo trabajo y sirve para despejar las posibles dudas de si el grupo es de esos de "un sólo éxito" (que va a ser que no).

jueves, 11 de noviembre de 2010

El ex "asesino" presenta disco en solitario

Más de 2.500 personas hacían cola el 9 de Octubre a las puertas de La Riviera para ver en concierto a Brandon Flowers...
Vale, vale... muchos dirán 'perdona, para ver ¿a quién?". Puede que este nombre no les suene, pero si decimos que fue el líder y voz principal de la banda estadounidense The Killers seguro que ya sabrán de quién se trata.
Este año se lanzaba a probar suerte en solitario con ‘Flamingo’, un disco muy personal y en una línea un poco ‘country’, un estilo que en principio puede llegar a asustar, pero que acaba funcionando perfectamente. El pasado día 9 de octubre lo presentaba por segunda vez en España (ya lo había hecho un día antes en Barcelona), y esta vez la ciudad elegida fue Madrid. A pesar de contar con el cartel de “entradas agotadas” como preaviso de las expectativas generadas en el público madrileño, el escepticismo era inevitable … ¿se habría desvinculado por completo del “rollo The Killers”? ¿Conseguiría llenar el escenario él solo? ¿Se atrevería con alguno de los temas de su anterior grupo?
Sí. Sí. Y también sí.
Durante un concierto de apenas una hora, Brandon lo da todo y se muestra bastante cómodo en su nueva faceta en solitario. Atrás quedan las alas y chalecos de plumas de su época “killera”. Ahora se presenta con un look a lo granjero, con tirantes y mangas remangadas. Parece que este disco es un punto y aparte en su trayectoria musical, aunque los grupos de fans con camisetas de The Killers que llenan la sala parezcan decir lo contrario…
El tema ‘On the floor’ es el encargado de abrir el concierto y nos arranca un “mmm, vaya, vaya… esto promete”. Ya con la segunda canción, el que fue su primer single, ‘Crossfire’, consigue ganarse al público por completo. Le siguen ‘Magdalena’, ‘Jilted Lovers’ y ‘Broken Hearts’, e incluso se atreve a versionar el clásico ‘Bette Davis Eyes’. Con el público totalmente entregado, llega la parte tranquila del concierto con baladas como ‘Right Behind you’, ‘Was it something I say’ y ‘Hard Enough’.
Como era de esperar, también incluye un tema de su último disco con The Killers, ‘Loosing touch’. No está mal pero, ¿y lo genial que hubiera sido que eligiera ‘Spaceman’? Poco después llega ‘Only The Young’, su nuevo single, aunque todavía poco explotado en emisoras y programas de videoclips. El público ya corea su nombre. Lo ha conseguido: ya no es el cantante de The Killers. Es Brandon.
Un par de temas más antes de retirarse... e incluso toca alguna de esas canciones “sorpresa” que sólo se encuentran en las versiones deluxe de los discos… en este caso, ‘The Clock was Tickin’. El público le pide un bis y elige para despedirse ‘When you were young’, en una versión mucho más intimista, en acústico, con un guitarrista a su lado. Y ya está. Brandon y sus músicos se retiran y se encienden las luces en La Riviera.
Nos vamos con buen sabor de boca. Brandon no ha defraudado para nada, al contrario. ‘Flamingo” gana mucho en directo. Hay que reconocer que el disco es algo soso, ¿para qué engañarnos? Apenas 1 ó 2 temas, 3 como mucho, consiguen salvarse. Pero en directo la cosa cambia. ¡Buen trabajo Brandon!

martes, 9 de noviembre de 2010

Empezamos...


"Todos nos movemos por algo y siempre hay algo que hace que nos movamos. A veces, incluso, sin importar la dirección... Cansados de la rutina que nos rodea, buscamos algo que llame nuestra atención y nos sorprenda.

El truco está en huir de lo convencional, de lo habitual, en salirse de los márgenes y transgredir.

Y cuando lo original se convierte en habitual y nos aburre, ¡vuelta a empezar!

Adelante...

Bizarritmo
No nos gusta lo raro, nos gusta lo diferente."